El bicho de Vigalondo. El director español Nacho Vigalondo vuelve a la gran pantalla con una comedia de ciencia-ficción para contar la vida de Gloria, una chica con problemas con el alcohol que se dará cuenta que causa muchos problemas mientras un monstruo está destrozando Seúl.
Con esta premisa inteligente y original nos adentramos en un argumento curioso que podría dar mucho más de sí con un giro argumental previsible y una difícil empatización con los personajes. Anne Hathaway y Jason Sudeikis son los encargados de llevar el ritmo y el cuerpo social de la película que, por momentos nos dan opciones a reflexionar sobre lo infantiles que podemos llegar a ser, entre algunas más posibles reflexiones que se quedan en nada y, en otros instantes, da pie a la ridiculez o estupidez de su conjunto.
Personalmente, me parece un proyecto ambicioso y diferente sobrellevado de la manera más loca y compleja que no termina de ser redondo quedándose así en tierra de nadie. Valoro sus objetivos, pero a mi no me da nada más que no sea algunos recuerdos a Godzilla y una historia previsible en todo momento.
Lo bueno: su originalidad.
Lo malo: que se desarrolle demasiado y se intuya todo. Y, también, la mala promoción.
Nota: 5’5/10
Distribuida por Versus Entertainment Estreno en 29 cines
El precio que hay que pagar para conseguirlo todo. El director Joseph Cedar nos quiere sumergir en un drama sobre un hombre corriente, Norman Oppenheimer, que se inventa un personaje para hacerse amigo de un político que años más tarde será el Primer Ministro de Israel y Norman se verá envuelto en una trama poco corriente.
Bella y bestia fueron y son. Uno de los mejores clásicos de Disney de la Historia del Cine vuelve a las salas de cine dejando atrás la animación y modernizándose con personajes de carne y hueso. El responsable es Bill Condon, director de nueve películas de todo tipo que, esta vez quiere demostrar que sabe revivir un clásico y puede renacer la sensación que todo amante de Disney tenemos dentro con este particular film.