
Aliens
Un regreso magnificado. James Cameron se encargó de hacer la secuela de Ridley Scott, pero debemos reconocer que tiene muchas diferencias y es peligroso decir que son primera y segunda parte.
Esta vez, la teniente Ripley vuelve al planeta del que se fue atemorizada para investigar qué le sucedido a la población. Partiendo de este argumento nuevo, el director consigue hacer una película magnificada en todo, es decir, tiene mucha más acción, más suspense, más personajes, más efectos y, en general, es más en todo comparado con la primera. Este factor puede ser bueno o malo, pero todos los aspectos consiguen cerrarse bien para completar una cinta magnífica, enérgica, inquietante a más no poder y que no defrauda al espectador.
Destacar la inmejorable y bárbara actuación de Weaver, la frenética banda sonora de James Horner y, sin remordimientos, los más que espectaculares efectos especiales. Inigualables. Mantiene los mismo errores que la primera -el ruido en el espacio- y hay aspectos que no quedan bien -los típicos marines musculados y sin gracia y la poco creíble inocencia de la niña-.
Una auténtica guerra contra aliens con suspense, intriga y mucha acción dejando de lado el terror -solo un poco- y completando una barbaridad de película.
Nota: 9/10

