
Después de la tormenta
Las emociones de Kore-Eda. El director japonés Hirokazu Kore-Eda vuelve a la gran pantalla con su último drama social basado en retratar la vida de un personaje desilusionado y su evolución con los problemas que le provocan tal sensación.
Volvemos a ver la detallada representación de la sociedad japonesa -como ya vimos en ‘Nuestra Hermana Pequeña’- mediante una familia normal y corriente con sus respectivos quehaceres. El director hace un trabajo minucioso de todo lo que rodea a los personajes correctamente interpretados sin buscar ni una lágrima ni ninguna emoción, simplemente quiere que simpaticemos con cada persona.
Personalmente, me esperaba otro tipo de historia ya que ésta se puede resumir en una hora y media sobre la vida de un hombre y una media hora de una posible reconciliación de pareja. No obstante, la idea de conseguir el objetivo del protagonista con la ayuda de un tifón es original, pero hasta entonces no hay nada a destacar.
Con todo esto, nos queda una típica cinta de drama con el toque personal de Kore-Eda siendo ésta inferior a otras de su filmografía.
Nota: 6’5/10

