
2001: una Odisea del Espacio
Señoras y señores, bienvenidos al espacio. Stanley Kubrick hizo lo imposible el año 1968 creando esta obra maestra de la ciencia-ficción y del cine. Y mi favorita.
Una película que penetra por los sentidos sin darte cuenta: por los ojos gracias a unos efectos especiales increíbles -sobretodo por la época- y por los oídos con una banda sonora elegante, variada y magistral -y clásica-. Juntos desarrollan en el espectador el sentido de la imaginación para que pienses en el significado de cada escena, plano o acción y vivas intensamente el significado de esta obra.
Ritmo muy lento para que el argumento -a veces difícil de entender- profundice en tu interior y te muestre la genialidad del espacio. Tiene detalles muy cuidados y momentos inolvidables.
Es una auténtica obra de arte en mayúsculas y precedente de muchas cintas posteriores. Más ciencia que ficción y muy difícil de superar.
Nota: 10/10

