
La Naranja Mecánica
Seamos psicópatas. Una de las mejores películas del cine dirigidas por Stanley Kubrick -como no- que pretende que nos pongamos en la piel de un psicópata y su grupo y nos dejemos llevar por su vida.
Mientras nos lleva con el protagonista -interpretado magníficamente por Malcom McDowell- nos brinda la oportunidad de ver teatro -las escenas iniciales y su conjunto-, música -banda sonora clásica- y fotografía -una cámara soberbia- unidos. Y es que, el argumento se desarrolla perfectamente con escenas duras y sin remordimientos con una durísima crítica a la política y a la sociedad.
Es una película que te obliga a fijarte en todo lo que sale en pantalla y hay elementos en los que no da importancia y, sin embargo, tiene mucha -actitud de los padres, crítica social-. Además, Kubrick hace alusiones a sus otras películas como “2001: una odisea en el espacio” y elementos que, más tarde, tomara de ejemplo -el policía sargento de la cárcel-.
El argumento puede parecer difícil de entender y podemos pensar en que es una paranoia kubrickiana, pero no es así. El director recrea un mundo futurista salvaje y violento con un toque filosófico y psicológico añadido junto a la crítica social desgarradora que, una vez terminada, nos obliga a pensar más allá de lo que nos ha mostrado para entenderlo y pensar en qué podemos llegar a ser.
Nota: 9/10

