
The Square
La locura del arte contemporáneo. El director sueco Ruben Östlund vuelve tres años después de la avalancha en los Alpes para exhibir al espectador una nueva obra de arte contemporáneo que fomenta los valores humanos y altruistas.
Esta película, ganadora del pasado Festival de Cannes, pretende hacer -y lo logra- un análisis de la sociedad actual, con el personaje de Christian. Muestra la debilidad de la naturaleza humana con la representación de diferentes clases sociales, diferentes riquezas y diferentes ambiciones que demuestran una obviedad actual. Cuidadosamente detallada y adecuadamente dirigida, este film es original y está bien interpretado, pero lo lleva todo tan al extremo que cansa, y mucho. Es una creación de dos horas y veinte minutos que, en resumidas cuentas, nos ilustra lo inútil y falsa que puede ser una persona, pero lo hace de la manera más lenta y aburrida posible.
Personalmente, la vi con buenas intenciones pues tenía buenas referencias de ellas, pero desde muy temprano empecé a agonizar y a buscar el porqué de según qué escenas que no quieren demostrar nada diferente de lo que ya muestran otras. Además, contiene instantes de humor que, como espectador, o te diviertes, o solo piensas en salir a escondidas de la sala y evitar perecer al momento.
Lo bueno: su originalidad y detalles que conllevan una obligada reflexión.
Lo malo: su ornamentación innecesaria que la hace interminable.
Nota 5’5/10
Distribuida por Avalon

