
El Informe Auschwitz
‘El Informe Auschwitz’ es un recomendable drama histórico, pese a no profundizar en la cuestión esencial de la historia.
Título original: The Auschwitz Report
Dirección: Peter Bebjak
Guion: Peter Bebjak, Tomás Bombík, Jozef Pastéka (basado en el libro de Alfred Wetzler, «What Dante Did Not See»)
Música: Mario Schneider
Fotografía: Martin Ziaran
Reparto: Noël Czuczor, Peter Ondrejicka, Wojciech Mecwaldowski, Jacek Beler, Michal Rezný, Kamil Nozynski, …
Fecha de estreno: 18/03/2021
País: Eslovaquia. Duración: 94 min. Género: Drama.
Distribuye: Karma Films. Cines: 73. Tráiler.
Sinopsis: explica la historia real de Rudolf Vrba y Alfred Wetzler, dos judíos eslovacos que escaparon del campo de exterminio Auschwitz-Birkenau en 1944 y intentaron regresar a Eslovaquia para explicar su testimonio y evitar más atrocidades.
Grandes cantidades de tinta y fotogramas se han invertido para dar una explicación coherente al exterminio de los considerados «enemigos» del Tercer Reich. Además, en la actualidad, debido al auge de la extrema derecha alrededor del mundo y, en concreto, en Europa, muchos cineastas utilizan el pasado para luchar contra la desmemoria actual y mantener presente esos años oscuros y violentos. En esta ocasión, el eslovaco Peter Bebjak explica una historia desconocida en el cine: el informe Vrba-Wetzler.
Dicho informe consiste en uno de los documentos de Los Protocolos de Auschwitz, una colección de testimonios sobre las atrocidades cometidas por los nacionalsocialistas en el campo de exterminio Auschwitz-Birkenau durante la Segunda Guerra Mundial (el Informe Vrba-Wetzler, el Informe Polaco y el Informe Rosin-Mordowicz). Para ello, Bebjak decide invertir gran parte del metraje a relatar la vida en el segundo campo de Auschwitz, Birknau, para así adentrar al espectador en la vida en un campo de exterminio. En otras palabras, y desde un punto de vista negativo, Bebjak recorre al recurso fácil y simple de mostrar la crueldad, el salvajismo y la brutalidad de los líderes nazis para llegar al público, como si no lo hubieramos visto ya en otras películas similares.
Pese a caer en recursos convencionales ya en este tipo de cintas, se debe remarcar la estética que emplea Bebjak y su equipo. Iluminación, fotografía, escenarios y montaje convergen a la perfección para ofrecer una experiencia dura y sensorial. Si un elemento a destacar tiene esta película, más allá de su estética, sería la capacidad de reproducir los sonidos propios de un campo de exterminio. Sirenas, trenes, gritos, respiraciones entrecortadas, mecheros, suspiros, suelo empantanado, y un largo etcétera. Podríamos, incluso, categorizarla de experiencia cinematográfica.
No obstante, como se ha comentado más arriba, el film invierte más tiempo en el retrato histórico que en la exposición de la gestión del testimoniaje de tales atrocidades cuando los protagonistas se entrevistaron con los Aliados. Precisamente, esta cuestión resulta mucho más interesante, tanto a nivel histórico como cinematográfico, para así mostrar como se evitó la continuada deportación de personas a Auschwitz y cómo se reaccionó ante semejantes revelaciones. Aun así, Peter Babjak logra realizar un trabajo más que recomendable y destacable dentro del saco de películas de la misma temática, aunque su final durante los créditos sea, a nivel personal, un error garrafal.
Lo bueno: su estética y la historia que hay detrás.
Lo malo: su errónea conexión del pasado con el presente en los títulos de crédito.
Nota: 7/10

